Los precios de las materias primas no paran de crecer y están ya en niveles previos a la pandemia del COVID-19. Esto obliga a que el precio final de la construcción aumente considerablemente debido a la inflación, y aún no hemos tocado techo.
A finales de septiembre de este año el IPC se situó en una tasa del 4%, una cifra que no era tan alta desde 2008. Ahora es probable que suba todavía más porque los precios de determinados bienes y servicios continúan su escalada. Entre ellos, la luz, que está ahogando tanto a particulares como a negocios. Y también lo han hecho las materias primas. El sector de la construcción es uno de los más afectados.
¿Por qué los precios de los materiales de construcción han subido tanto?
Los costes de construcción se han encarecido en los últimos meses por la existencia de una mayor demanda de productos después de la reactivación económica a nivel global.
Por un lado, el desabastecimiento, es decir, hay una escasez de materias primas y están tardando en llegar. Es el resultado de la recuperación de la demanda de estos productos a niveles previos a la pandemia, sobre todo, por parte de Estados Unidos. Hay más liquidez en el mercado, la gente compra más y, por eso, se reclaman más materiales.
Como decíamos, uno de los sectores más afectados es el de la construcción. Se están registrando incrementos de precios en materiales básicos como el acero o el cobre superiores al 78%. Las materias primas son más caras, pero los contratos y los plazos de obra siguen siendo los mismos. Por eso, 7 de cada 10 obras se están paralizando o ralentizando.
Pero,
¿Qué efectos podría generar un prolongado aumento de los costes de construcción en la evolución de la obra nueva en nuestro país?
Los precios de los materiales de construcción se disparan: «Si seguimos así, la vivienda de obra nueva subirá más». Así lo destacaban en un artículo de elDiario.es. El cemento, el hormigón, el acero, el cobre, el aluminio, la madera, los plásticos…, la reactivación económica toca al sector de la construcción, amenaza la viabilidad de nuevas promociones y presiona al alza el precio de la vivienda.
Este aumento en el coste de los materiales de construcción lleva meses subiendo en todo el mundo. Esto tiene dos efectos inmediatos: el primero, que las promotoras ganarán menos con los pisos que ya hayan vendido; el segundo, que los que saquen a partir de ahora puedan ser más caros.
Lo mismo pasa para las empresas de reformas, que viven una época dorada posterior al confinamiento: o asumen la subida o modifican los presupuestos al alza. En España, la subida de los costes ya se observa en los datos oficiales del Ministerio de Transportes. El siguiente gráfico muestra la evolución de los precios desde 2006, teniendo en cuenta sólo materiales y no mano de obra.
Los precios de los materiales están en máximos
No es una situación del todo insólita. Esta inflación, que ya ocurrió en crisis como la del acero de 2006 o la del petróleo en los años 70, está propiciada por el aumento de la demanda al calor de la recuperación económica, la lenta mejora de la capacidad productiva a nivel mundial y la importante subida del coste del transporte marítimo, como apuntábamos anteriormente.
La recuperación ha llegado con fuerza al sector de la construcción y se ha encontrado con un problema de escasez de oferta. Los analistas creen que la situación es transitoria y se moderará a medida que recuperemos la normalidad.
La madera triplica su precio en un año, el acero lo dobla
Algunos datos relacionados a tener en cuenta:
- El acero corrugado, el que se emplea para construcción de estructuras de hormigón acumula un incremento del 92% desde septiembre del pasado año, según el índice de la Asociación Nacional de Industriales de Ferralla (ANIFER). La subida del precio del acero impacta también en los materiales de ferretería que han llegado a encarecerse entre un 17% y un 38%.
- La madera ha sido una de las materias primas que más se han encarecido. La escasez de este producto, que se convierte en vigas o tableros para la construcción, ha provocado que su precio esté en estos momentos un 74%. ¿Por qué es tan cara? Los motivos de esta escasez son principalmente el creciente mercado de la vivienda y el mercado de la construcción en muchas partes del mundo, especialmente en Estados Unidos, que se apoya en la exportación por parte de Escandinavia. Al igual que China, que ha vuelto a incrementar sus compras en los países nórdicos. Basta decir que los niveles de existencias de los aserraderos escandinavos son los más bajos en los últimos 20 años. Y han sido varios los factores que han creado la tormenta perfecta.
Más datos referentes a otras materias primas:
- La rápida recuperación económica global ha hecho que el precio del petróleo también se haya disparado. Esta subida ha arrastrado a todos los productos que lo utilizan en su composición.
- Las mezclas bituminosas, que se utilizan para las obras de asfaltado son ahora un 85% más caras que en el mínimo registrado en 2020.
- El precio del cobre ha aumentado un 102% y el aluminio un 53% desde el inicio de la crisis del COVID-19, según datos aportados por SEOPAN (Asociación de Empresas Constructoras y Concesionarias de Infraestructuras).
Esta evolución de los precios ha provocado que muchas obras que estaban a punto de ponerse en marcha hayan decidido esperar a que los precios se moderen.
Los plazo de entrega peligran y se reflejan en el precio de la vivienda
Estos son algunos de los titulares con los que nos encontramos a día de hoy:
“El precio disparado de los materiales encarece un 10% la ejecución de las obras.”
“La construcción también se para: el 40% de sus empresas han detenido o cancelado obras por la subida de precios de materias primas.”
Hasta el momento, las más afectadas son las constructoras, las nuevas promociones y la obra pública. La revisión de precios en los contratos de obras públicas no es obligatoria y debe justificarse en cada pliego. En cambio, los reformistas y empresas que trabajan en obra privada están adelantando ese dinero para conseguir materiales al precio actual, antes de nuevas subidas.
Se prevé que la tendencia se prolongará hasta principios de 2022, lo que podría absorber los beneficios esperados de muchas compañías dedicadas a la promoción de viviendas de obra nueva residencial. Los expertos del sector de la construcción admiten que es complicado lanzar previsiones sobre la prolongación temporal del coste de los materiales.
Es posible que esto tenga efecto en el aumento de los costes de construcción sobre el producto final. Esta tendencia se trasladaría al precio de la obra nueva, aunque no se espera una caída de las ventas porque hay mucha demanda interesada en comprar.
Fondos europeos, Next Generation EU
Lo que sí les preocupa a las compañías es lo que pueda suceder en los próximos años con la llegada de los 70.000 millones de las ayudas europeas. Fernández Alén, Presidente de la Confederación Nacional de la Construcción (CNC) ha asegurado que siete de cada diez euros que recibirá España de los fondos Next Generation serán gestionados por el sector de la construcción. Y su miedo es que, con la subida de precios y el retraso en la llegada de las materias primas, “hay un peligro de indigestión, ya que la tardanza en su gestión y ejecución, unido a este encarecimiento y a la falta de mano de obra, provocará cuellos de botella que pueden terminar frenando el ritmo de la recuperación”.
Aunque la Organización Mundial del Comercio (OMC) asegura que la situación con las materias primas se está normalizando y que el stock se está reponiendo, desde el sector de la construcción no tienen la misma percepción. Ni ven relajación en los precios ni que los materiales estén llegando en plazo. Por ello, pidieron ya meses atrás al Gobierno como medida fundamental que se establezca un sistema automático de reequilibrio de precios que permita hacer frente a ese sobrecoste y que, por tanto, tenga en cuenta las alteraciones de precios posteriores a la presentación de ofertas, tanto al alza como a la baja, buscando dotar de estabilidad a los contratos. Se trata de una medida derogada con la Ley de Desindexación de los precios y que la CNC considera vital en este momento para poder cumplir con los contratos, que es lo que las compañías quieren, ha asegurado Fernández Alén. Aunque, de momento, están a la espera de la respuesta de la administración.
«La viabilidad de muchos contratos se ponen en cuestión porque el sobrecoste que sufren las empresas constructoras no puede mantenerse en el tiempo»
En GRUPO PAGÈS BCN permanecemos atentos a las últimas novedades y noticias del sector referente al alza de los precios de los materiales de construcción. Si tienes alguna duda te invitamos a contactar con nosotros a través de nuestras redes sociales o correo electrónico.
REFERENCIAS: